ÁNGELES. Pequeñas horquillas doradas en las solapas. Ángeles. Figuras de porcelana tocando una trompeta en las mesitas de centro. Ángeles. Relatos de amigos desconocidos realizando acciones incuestionables. Ángeles. Parecen estar en todas partes, desde la ropa hasta los muebles, y los testimonios. ¿Cómo debemos interpretar este fenómeno? ¿Cómo un aluvión de bondad celestial? ¿O cómo un engaño demoníaco? ¿Cómo podemos estar seguros de que se trata de algo bueno sin caer en lo malo? David Jeremiah se ha propuesto dar alguna orientación sobre este tema celestial.