Este libro tiene dos objetivos: resumir la enseñanza del Nuevo Testamento sobre los dones espirituales y ayudarlo a descubrir los suyos. El capítulo uno aclara y despeja los pedregones y obstáculos del campo. El dos identifica los dones espirituales y el tres los define. El capítulo cuatro trata con las preguntas que hacen los cristianos acerca de aquéllos. El cinco proporciona pautas bíblicas para usarlos. Finalmente, el último capítulo ofrece una forma práctica de conocer sus dones espirituales.
El estudio bíblico del Nuevo Testamento, acerca de los dones del Espíritu Santo, busca a unir a los cristianos, separarlos; aumentar nuestra dependencia con Cristo, no disminuirla; alentar una mayor diversidad entre los cristianos, no mayor igualdad; y perseguir la humildad, no el orgullo. En estas páginas mi intención es apegarme cautelosamente a la enseñanza del Nuevo Testamento sobre los dones espirituales. Este libro lo ayudará a comprender, descubrir y usar los suyos. Al hacerlo, podrá glorificar a Dios en todo lo que haga, llegar a su pleno potencial y recibir recompensas eternas para una vida bien aprovechada.
–Kenneth Cain Kinghorn, en el Prefacio.