En este libro, el erudito bíblico y pastor James Hamilton examina cuál es el lugar del trabajo en el gran relato de la Biblia, y expone la gloria que Dios pretendía cuando le dio al ser humano un trabajo que hacer, la ruina que acarreó la caída, y la redención que está por venir. De este modo, ofrece esperanza de florecimiento en medio de la futilidad caída.