¿Qué debo esperar de la vida? ¿Qué planes tengo para el mañana? ¿Me rendiré ante el primer obstáculo?
La vida en este mundo es un viaje que comienza el día en que nacemos y terminará cuando despertemos en la presencia del Señor. Aunque muchas veces nos asustamos por no saber lo que nos deparará el futuro, debemos tener la seguridad de que en medio de tantas aventuras, sonrisas y lágrimas está el Único capaz de darle sentido a todo lo que enfrentamos y que será para nuestro bien.
Aun así, cada día tenemos que decidir lo que haremos con nuestra vida. Quizá tengamos buenos propósitos, pero a menudo estos son sólo buenas intenciones que se destrozan con el paso de los años. Sin embargo, debemos ser sabios y decidir, con la ayuda de Dios, quiénes queremos llegar a ser. ¿Triunfadores o perdedores? ¡Qué tarea tan difícil!
Es posible que tu vida en estos momentos no sea tan espectacular como desearías, pero este no es el momento de rendirte. ¡Emprende el camino con Dios y descubre las maravillas de disfrutar todas las bendiciones que Él quiere darte en este viaje hacia la vida!