La iglesia se encuentra nuevamente en una encrucijada y esta vez ante la llamada “revolución sexual” de los Siglos XX yXXI. Por encima de las capas de complejidad que envuelven el polémico tópico de LGBTQ+ e ideología de género, también existe una brecha generacional dentro dela misma iglesia respecto a la manera en que debemos responder.
En términos bastantes generales, he observado la generación adulta responder con firmeza y la generación de menores de edad responder bajo el estandarte de“tolerancia” que exige el relativismo de su generación. El presente dilema nose resuelva fácilmente y lo último que queremos es que se divida la iglesia de Jesús sobre el tópico de la sexualidad e identidad de género cuando hay una mejor manera (y creo más bíblica) de responder.
Autonomía sexual en un mundo pos moderno fue escrito con ese fin en mente. ¿Cómo podemos ser firmes en las eternas verdades del Señor ante un mundo cuyo pensamiento ha cambiado tanto por la reciente globalización? ¿Cómo podemos, como Jesús, ser llenos de gracia y verdad (Juan 1:14), sin forjar una falsa dicótoma entre la gracia y la verdad?Respondo en tres partes.