Pero, ¿y esos días de embotellamientos, aeropuertos cerrados y amigos que se olvidad de nosotros? ¿Hay esperanza para esos días llenos de fracasos y contratiempos?En gran día cada día, Max Lucado desenrolla los planes de Jesús para manejar días así: Colmar tu día con la gracia de Jesús. Poner tu día bajo Su vigilancia. Aceptar Su guía. Es la única receta para llenar tu día del propósito de Dios.